1.Un par de días antes pondremos a macerar el pollo troceado con todos los ingredientes señalados, dentro de un mismo recipiente.

2.Las patatas las limpiaremos bien con un cepillo, y las pondremos a hervir con agua y una pizca de sal, sin quitarles la piel, reservándolas una vez que estén casi cocidas.

3.Mientras cuecen las patatas podremos preparar una mantequilla a las finas hierbas, mezclando la mantequilla suficiente con un una cucharada sopera de finas hierbas, agregándole el zumo de medio limón.

4.Colocaremos el pollo macerado sobre la barbacoa para que se ase, así como las patatas cortadas por su mitad, untadas con la mantequilla a las finas hierbas y envueltas en papel de aluminio, para evitar que se quemen. Dándole a estos elementos un par de vueltas en la barbacoa hasta que estén debidamente asados, momento en el cual los serviremos calientes.

Las finas hierbas consistirán en estragón, perifollo, cebollino, perejil y pimienta; se pueden sustituir por especias para barbacoa.

Les sugiero que añadan una par de cebollas y pimientos, envueltos en papel de aluminio y asados en la barbacoa, que trocearán finamente después para añadir a todo el conjunto, con un chorrito de aceite de oliva, y una pizca de sal, por ejemplo.
Es una receta con la que podremos sorprender a nuestros comensales con la maceración del pollo y las patatas así preparadas.

Sino quiere que cuando se siente a la mesa, lo hayan devorado todo, puede ir preparando todo y guardando en ollas o recipientes cerrados en una cercana y caliente de la barbacoa, para evitar que las viandas se enfríen.

No olvide esto último.