1. Herviremos en una olla las patatas con su piel.
2. Quitaremos la piel a las patatas hervidas y las cortaremos en rodajas muy finas.
3. Colocaremos la mitad de las patatas en un molde o fuente de horno y las salpimentaremos.
4. Pondremos encima de esas patatas el puerro finamente cortado y extendido, añadiéndole a continuación, el resto de las patatas.
5. Sazonaremos de nuevo esas patatas añadidas y les esparciremos por encima pequeños trozos de pimiento rojo.
6. En un bol batiremos con la ayuda de unas barillas la nata, los huevos, las hierbas finas bien picaditas, un pizca de sal, una pizca de pimienta y otra de nuez moscada.
7. Recubriremos las patatas y pimientos con el batido del punto anterior.
8. Espolvorearemos el queso Gruyère rallado y lo pondremos a gratinar por espacio de unos 8 a 10 minutos, antes de servirlo a nuestros comensales.

Esta es una receta facilitada por Irma Lobeto, de Suiza.