1. Pondremos las alubias a remojo la noche anterior, escurriéndolas bien por la mañana antes de meterlas en una olla de hierro colado o similar a cocer con un poco de agua.
2. Desgranaremos las habas tiernas y las lavaremos antes de agregarlas a la cocción anterior. Aquellas habas que no contengan granos, podremos lavarlas, eliminar sus extremos y ponerlas en esa cocción.
3. Limpiaremos, lavaremos y cortaremos a trozos las alcachofas, antes de añadirlas a la cocción, a la que también le sumaremos un chorro de aceite de oliva y un poco de sal.
4. Dejaremos que cueza a fuego lento, hasta conseguir una perfecta cocción y una media hora antes de retirarla del fuego le añadiremos el arroz, el azafrán y la rectificaremos de sal.
5. Deberemos de tratar de que quede un arroz caldoso, ya que de esa manera quedará en su punto, y lo serviremos caliente a nuestros comensales.

Recibía este nombre por que era evidente que aquella persona a la que se le preguntaba, ¿qué había comido al mediodía?, solía responder: 'Arrós clarico me creo', indicando por tanto a su interlocutor de que había comido caliente, y que podría ser arroz, lo que ya de por sí era un logro, en épocas de mucho hambre en la comarca de la Vega Baja alicantina.

El tiempo calculado es muy variable.